miércoles, 18 de enero de 2012

(Para seguir la historia empezar primero por abajo, gracias)
Pero poco apoco, se fue dando cuenta de que se estaba enamorando de ese chico, ese que la quería tanto, ese con el que compartía una vida de secretos, su mejor amigo. Él la quería y se lo demostraba continuamente, en esos largos paseos por playa, enseñándola el escondrijo secreto de su familia que era un minúsculo pasillo pero que luego daba lugar a una cueva inmensa donde el agua de mar y las olas les rompía en los pies, donde compartieron su primer beso, y la ilusión de volver a verse. Sí, vivieron muchas cosas maravillosas el uno junto al otro, pero un pequeño desliz por parte de Elena, acabó con tanta felicidad, y con la relación de amistad que mantenían durante 17 años. Cada uno siguió con su vida y, dificilmente, lo superaron, por lo menos eso era lo que ellos creían, hasta que se volvieron a encontrar y se decidieron  dar otra oportunidad, la cual fue muy aprovechada, ya que juntos compartieron su primera vez.
En mi opinión, Setas Verdes era una novela muy completa, y estaba bastante bien estructurada, y por lo que me han dicho familiares y amigos, muy interesante, fue una pena que todo se fuera al traste, pero eso no me hizo dejar de escribir, no, es más, hace poco empezé otra novela, titulada igual (para que iba a desaprovecharlo), de un tema totalmente diferente, pero igual de interesante.

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